Los años 20 en Vichy
Evocar la ópera de Vichy es volver inevitablemente a los años 20, o a los locos años 20, cuando la élite de los cinco continentes acudía a Vichy, imantada por la poderosa atracción del juego, la promesa de una vida social y cultural bondadosa y la creencia ciega en los finos discursos cuadrados de una medicina imperiosa, si no imperial. Muy a menudo, una simple pero presentable dolencia crónica era utilizada como coartada para venir a «quedarse» en Vichy, lugar de «vacaciones» por excelencia. Estancia, vacaciones, dos palabras que se han quedado en el fondo del diccionario pero que no están tan obsoletas ya que siguen conformando, hoy en día, el aura de esta ciudad donde el pasado y el presente se mezclan íntimamente.